JIRA ante la Huelga General en Educación del 9 de mayo

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El próximo 9 de mayo los andaluces y andaluzas tenemos una nueva jornada de lucha. La huelga general en educación convocada a nivel estatal, responde a las continuas agresiones al sistema estatal de educación y, en consecuencia, al mantenimiento de la misma.

Como jóvenes y estudiantes revolucionarias, entendemos que la educación estatal sólo sirve para domar y domesticar a la juventud que en el futuro tendrá que vender su cuerpo y sus manos para sobrevivir. Que el sistema educativo es la educación del sistema. Pero también sabemos que sin una mínima formación general no podemos enfrentarnos a quienes nos oprimen. El problema radica en que las clases dominantes europeas y españolas, ante la actual coyuntura, están desmantelando todo lo conquistado por las pasadas generaciones. Unos derechos mínimos en todos los ámbitos (sanidad, educación…) que ya sobran, y que paulatinamente están siendo dinamitados por quienes ya ni siquiera quieren una juventud adoctrinada en valores capitalistas, españolistas, europeístas y patriarcales, sino que ya sólo servimos como futura mano de obra barata especializada. Sabremos lo que ellos quieran que sepamos, lo básico e imprescindible para que todo siga funcionando como hasta ahora.

Aspiramos a construir una sociedad en la que la educación parta de las propias comunidades, una educación en la que la cultura, la historia y la lengua de nuestro país no se ignoren ni sean infravaloradas, sino que sean la base para cualquier hija de nuestro Pueblo. Una educación andaluza, laica, de base, antipatriarcal, revolucionaria, no jerarquizada, en la que tanto profesorado como alumnado intercambien conocimientos e inquietudes. En la que ser crítica no suponga ser señalada. Una educación, en definitiva, para todas y todos. Pero esta aspiración no dejará de ser una utopía mientras la educación estatal sea privatizada a todos los niveles, introduciendo en ella a empresas privadas y a la banca. Decidiendo qué debemos estudiar y qué ramas de conocimiento sobran. Precarizando los servicios y aumentando tasas, disminuyendo becas, etc.

Por todo ello, apoyamos esta nueva convocatoria de huelga en la que como estudiantes somos las principales víctimas de la precarización del profesorado, del aumento de ratio, del despido de más de 4.500 interinos e internas, gracias a las medidas “de progreso” del gobierno del PSOE-IU. Porque cuando roban a la clase trabajadora, cuando impiden el acceso a la educación estatal a la juventud andaluza, no valen las excusas. O se está con el Pueblo, o se está contra él. Y tanto el gobierno español como su sucursal “progresista” en Andalucía, son el enemigo. Y al enemigo no se le discute, se le destruye. Nuestras vidas valen más que sus sillones.

Desde JIRA animamos y convocamos al estudiantado andaluz, a nuestra militancia, a formar parte activa de aquellas movilizaciones que sean convocadas por organizaciones que no formen parte del régimen. De nada vale salir a la calle con quienes han facilitado, con su colaboración incondicional, que todo lo que está pasando sea posible.

 ¡Trabajadora o estudiante, la lucha es el único camino!

 ¡La juventud andaluza por una educación nacional, antipatriarcal y popular!

 JIRA, la juventud independentista revolucionaria andaluza

 Andalucía, Mediterráneo occidental, a 8 de mayo de 2013

(Andalú)

JIRA ante la Uerga Henerá en Edukazión der 9’e mayo

 Er prózimo 9 e mayo loh andaluzeh i andaluzah tenemoh una nueba joh-ná e luxa. La uerga henerá en edukazión konboká a nivé ehtatá, eh una rehpuehta a lah kontinuah agrezioneh ar zihtema ehtatà edukatibo i, en konzekuenzia, ar mantenimiento’e la mihma.

Komo mozah i ehtudianteh reboluzionariah, entendemoh ke la edukazión ehtatá zólo zirbe pa domà i domehtikà a la hubentú ke n’er futuro tendrá ke bendè zu kuerpo i zuh manoh pa zobrebibì. K’er zihtema edukatibo eh la edukazión der zihtema. Mah tambié zabemoh ke zin una mínima formazión henerá no podemoh enfrentah-noh a kieneh noh oprimen. Er problema radika en ke lah klazeh dominanteh europeah, ehpañolah, ante la ahtuá zituazión en to loh ámbitoh (zanidá, edukazión…) ke ya zobran, i ke paulatinamente ehtán ziendo rebentaoh por kieneh ya ni zikiera kieren una hubentú adohtriná en valoreh kapitalihtah, ehpañolihtah, europeíhtah i patriarkaleh, zino ke ya ná mah ke zerbimoh komo futura mano de obra barata ehpezializá. Zabremoh lo ke elloh kieran ke zepamoh, lo báziko e imprehzindible pa ke to ziga funzionando komo ahta ara.

Ahpiramoh a lebantà una komunidá en la ke la edukazión zarga’e lah mihmah komunidadeh, una edukazión en la ke la kurtura, la ihtoria i la lengua’e nuehtro paíh no ze ihnoren ni zean infrabaloráh, zino ke zean la baze pa kuarkiè iha’e nuehtro Pueblo. Una edukazión andaluza, laika, e baze, antipatriarká, reboluzionaria, no herarkizá, en la ke tanto er profezorao komo el alumnao interkambien konozomientoh e inkietudeh. En la ke zè krítika no zuponga zè señalá. Una edukazión, en remate, pa toah i toh. Mah ehta ahpirazión no dehará’e zè una utopía mientrah la edukazión ehtatá zea pribatizá a toh loh nibeleh, metiendo en ella a lah emprezah pribáh i a la banka. Dezidiendo ké debemos ehtudià i ké ramah e zabè zobran. Prekarizando loh zerbizioh i aumentando tazah, kitanto bekah, ehz.

 Por to ello, apoyamoh ehta nueba konbokatoria’e uerga en la ke komo ehtudianteh zomoh lah primerah bíhtimah e la prekarizazión der profezorao, del aumento’e ratio, der dehpaxe’e mah e 4.500 interinoh e interinah, graziah a lah medíah “e progrezo” der gobiehno der PSOE-IU. Porke kuando roban a la klaze trabahaora, kuando impiden entrà a la edukazión ehtatá a la hubentú andaluza, no balen lah ehkuzah. U ze ehtá kon er Pueblo, u ze ehtá kontra éh. I tanto er gobiehno ehpañó komo zu zukurzá “progrezihta” en Andaluzía, zon el enemigo. I al enemigo no ze le dihkute, ze le rebienta. Nuehtrah bíah balen mah ke zuh zilloneh.

 Dehde JIRA animamoh i konbokamoh al ehtudiantao andalú, a nuehtra militanzia, a formà parte ahtiba’e akellah mobilizazioneh ke zean konbokáh por organizazioneh ke no formen parte der réhimen. Pa ná bale zalì a la kalle kon kieneh an fazilitao, kon zu kolaborazión inkondizioná, ke to lo ke ehtá pazando zea pozible.

Trabahaora u ehtudiante, la luxa eh el úniko kamino!

 La hubentú andaluza por una edukazión nazioná, antipatriarká i populà!

JIRA, la hubentú independentihta reboluzionaria andaluza

 Andaluzía, Mediterráneo ozidentá, 8’e mayo der 2013

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Comunicado del MAIS con motivo del 1º de mayo: Andalucía puede salir de la crisis rompiendo con el euro y con España

MAIS

 

 

1 473 700 andaluces/zas en el paro según las estadísticas oficiales. El 31,6% de los andaluces/zas viviendo bajo el umbral de la pobreza. El PIB per cápita 5000€ por debajo de la media estatal. Más del 60% de nuestra juventud parada… El pueblo andaluz conoce bien lo que significa vivir en crisis. Andalucía vive desde hace ya demasiado tiempo bajo la bota de un estado imperialista, España, y de un sistema económico, el capitalismo, que ha convertido a la economía andaluza en una fuente inagotable de riquezas para la vieja nobleza (heredera de los conquistadores) y la burguesía, pero también ha hecho de la economía una fuente de crisis continua para el pueblo trabajador andaluz. La inserción de Andalucía en Europa a partir de 1986, sin consulta que avalara tal decisión, ha facilitado aún más nuestro papel subalterno y dependiente en el marco actual, facilitando con la moneda europea nuestra mayor crisis.

En el día internacional de la Clase Obrera, desde el Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista no podemos dejar de señalar que la crisis actual provocada y pilotada por los grandes capitales europeos y mundiales, tiene como objetivo aumentar el grado de explotación de las clases populares para engordar las tasas de ganancia del Capital. La Unión Europea y el Estado español, sus fieles lacayos, están aplicándose a fondo en esa tarea, desmontando los antiguos “estados del bienestar” que mantuvieron a duras penas la paz social durante algunas décadas y construyendo a la par un estado policial para frenar la protesta social y el descontento creciente entre las clases populares.

En este marco situamos el sometimiento de la Andalucía rebelde que tanto temen los capitalistas. Los “parias del Sur” hemos sido molest@s y pretenden callarnos de todas las formas posibles: construyendo un presunto gobierno autonómico que tan sólo ha servido para mejorar la explotación de nuestro pueblo y nuestra tierra, sobornando a una izquierda reformista y timorata cuya mayor aspiración es convertirse en la dueña del “cortijo” que aplica recortes por “imperativo legal”, comprando a unas centrales sindicales que desde hace mucho tiempo son parte del problema en lugar de formar parte de la solución, alienando a nuestro pueblo y ridiculizando nuestra cultura…

Desde el Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista tenemos claro que en Andalucía hay suficientes riquezas para que el pueblo andaluz viva una vida plena con trabajo, vivienda y dignidad. Andalucía puede salir de esta crisis por sí misma. Sin esperar a ningún salvador.

Andalucía puede salir de esta crisis rompiendo con el euro. La moneda de la Unión Europea, de los grandes capitales alemanes, franceses y españoles, con la que el pueblo andaluz sólo ha conseguido un aumento vertiginoso de los precios y una pérdida de poder adquisitivo evidente. Una moneda que es la justificación para recortar más y más nuestros derechos. La UE desmanteló la flota pesquera andaluza, paga a los grandes terratenientes por no cultivar las tierras y construyó autovías para facilitar que emigrásemos a Cataluña, a Francia o a Alemania, mientras desmantelaban nuestro tejido productivo para aumentar sus cuotas de mercado vendiendo sus productos.

Andalucía puede salir de esta crisis rompiendo con España. Un estado cuya “tradición” con respecto a Andalucía consiste en utilizarnos como una colonia interior de la que extraer plusvalías, mano de obra barata o conseguir peso geoestratégico, haciéndose dueña de nuestro territorio. La crisis para l@s andaluces/zas viene de lejos y, si en el año 1800 Andalucía era aún la nación más rica del estado español, dos siglos después el empobrecimiento de nuestra tierra es evidente.

Este 1º de Mayo, día internacional de la Clase Obrera, la clase obrera andaluza tiene un reto: construir un movimiento obrero en Andalucía suficientemente fuerte (cuantitativa y cualitativamente) para enfrentarse a las cadenas que el Capital ha puesto en los pies de l@s trabajadores/as andaluces/zas para su explotación asalariada. Unas cadenas que son esencialmente España, como expresión geopolítica hegemónica del capitalismo internacional en nuestra tierra, y el euro, como concreción monetaria y económica hegemónica del Capital.

Las tareas del proletariado andaluz y las clases populares no son baladíes. En la actualidad el sindicalismo andaluz de clase está avanzando en sus posiciones. Pero hay que reforzar los avances con la construcción de la unidad política en torno a un frente que sea expresión específica, unitaria y organizada de la izquierda soberanista andaluza. Desde el MAIS trabajamos para que nuestra I Asamblea Nacional, que celebraremos este verano, suponga un paso más en esta tarea.

Asimismo, llamamos a l@s militantes de las organizaciones que conforman el MAIS, simpatizantes del Movimiento y andaluces/zas de conciencia en general a participar en las movilizaciones que se van a realizar este 1º de Mayo por parte del S.A.T. y el sindicalismo alternativo andaluz de clase, como expresión de la unidad sindical anticapitalista andaluza.

¡Viva el 1º de Mayo!
¡Viva la lucha de la clase obrera!
¡Viva Andalucía libre y socialista!

Mesa nacional del MAIS.
Andalucía, 29 de abril de 2013.

JIRA ante la represión a la juventud vasca y en solidaridad con las detenidas

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Ante la detención de ocho compañeros/as vascos/as por parte de la policía vasca, JIRA quiere exponer su más contundente rechazo a esta nueva operación represiva y apoyar la lucha de la juventud revolucionaria vasca por la conquista de sus derechos nacionales y sociales.

El Pueblo Trabajador Vasco en general y su juventud trabajadora en particular, son todo un ejemplo de lucha y constancia revolucionaria para los demás pueblos que luchamos también por la soberanía nacional, el socialismo y contra el patriarcado. A la policía vasca no le bastó con acabar con la vida de otro joven, Íñigo Cabacas, ahora se dedica a detener y reprimir a cualquiera que intente seguir un ejemplo de lucha similar.

Una desproporcionada cantidad de policías irrumpieron en Aske Gunea donde un millar de abertzales arropaban a estas jóvenes combatientes, que habían sido criminalizadas por la “justicia” española. De esta forma la policía vasca vuelve a demostrar que su papel no es otro que el de ser un brazo de la más cruda represión del Estado Español sobre el Pueblo Vasco.

 

Un impresionante muro de dignidad se formó alrededor de la juventud más consciente y organizada. Pese a la solidaridad, las personas que intentaban evitar las detenciones han tenido que aguantar empujones, porrazos y arrastres por parte de las fuerzas represivas que han dejado un saldo de decenas de heridas, aunque la peor herida, estamos seguras, ha sido la de ver como se llevaban arrastras y detenidas a la juventud combatiente. Después de varias horas consiguieron apresar a quienes allí se encontraban e irán a juicio en los próximos días.

También queremos mostrar nuestra solidaridad con las detenidas castellanas que se solidarizaban en una concentración en Madrid, pidiendo la libertad de las detenidas. El Estado no sólo reprime a quienes luchan, sino también a quienes se solidarizan con una causa común. Exijimos, al igual que con las detenidas en el País Vasco, su inmediata puesta en libertad y su absolución.

Desde Andalucía queremos mandarles todos nuestro apoyo y fuerzas y les animamos a que sigan luchando sin dar tregua a aquellos que quieren vernos asimiladas, sumisas y esclavas. No habrá policías ni prisiones que acaben con nuestras ganas de luchar.

          Gora Euskal Herria askatuta!

          ¡Vivan Euskal Herria y Andalucía libres, socialistas y feministas!

 

JIRA, la juventud independentista revolucionaria andaluza

 

Andalucía, Mediterráneo occidental, a 21 de abril de 2013.

Saludo de JIRA a Adiante en su IV Congreso Nacional

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Ante el IV Congreso Nacional de Adiante, desde este rincón del Mediterráneo, saludamos a la juventud comunista e independentista gallega. La lucha contra España, el Capital y el Patriarcado no entiende de fronteras. Hacemos nuestra la afirmación “el internacionalismo es la ternura de los pueblos”.

Como jóvenes andaluzas/ces, compartimos luchas y realidades con la juventud trabajadora gallega. Andalucía y Galicia son dos países oprimidos por un Estado que nos niega como nación, como Pueblo. Por una Unión Europea que nos asfixia económica y socialmente con “recortes” y leyes que únicamente benefician a las pequeñas y grandes burguesías centro-europeas. No olvidamos al Patriarcado, un aliado histórico del Capital, que ejerce sobre las mujeres -también sobre los hombres- diferentes formas de represión individual y colectiva que anula la capacidad de decidir sobre nuestras vidas y nuestros cuerpos, estandarizando la forma de relacionarnos y de comportarnos.

Por nuestra pertenencia a territorios escasamente industrializados, el rural es un eje fundamental en nuestras vidas. Nuestras culturas, la situación de las clases trabajadoras de nuestros países, así lo muestran. España y el Capital, como enemigos de clase, nos empujan -si alguna vez dejaron de hacerlo- a la emigración forzosa a destinos laborales donde no nos espera otra cosa que más explotación y precariedad. Somos las hijas y los hijos de nuestros Pueblos. La despoblación del rural en beneficio de las grandes ciudades es un hecho. En definitiva, este sistema deshumanizador, quiere separarnos de nuestras raíces, quiere convertirnos en máquinas cuyo único objetivo sea producir, producir para una minoría que nos explota, nos humilla y nos asesina. Esta España cada vez más agonizante, quiere “españolizarnos”, como declaraba el muy español Wert. Llevan españolizándonos durante siglos, y pese a ello, aún siguen habiendo jóvenes que resisten a esa españolización. Resistimos y resistiremos. Combatir por lo que es nuestro, por lo que es justo, es vivir. El Sistema no quiere que luchemos, porque si luchamos es que estamos vivas.

No nos queda más que reconocer vuestra lucha, una lucha de casi una década en la que la juventud trabajadora gallega ha tenido una herramienta con la cual hacer frente a quienes nos oprimen como clase, como jóvenes, como mujeres. A aquellas y aquellos que destruyen la tierra para engordar sus cuentas, a quienes detienen, encarcelan y dispersan, a todos aquellos que quieren negar nuestro derecho a decidir sobre lo que es nuestro. A ser libres, iguales. La conquista de una Galicia libre, socialista y antipatriarcal está cada vez más cerca. Mientras haya personas dispuestas a combatir, hay lugar para la esperanza. Os deseamos todas las victorias posibles en vuestro camino por la emancipación. La juventud es un arma cargada de futuro.

¡Viva Galicia libre, socialista y feminista!

¡Viva Andalucía libre, socialista y feminista!

¡Viva la juventud combativa!

Denantes mortas que escravas!

JIRA, la juventud independentista revolucionaria andaluza

 Andalucía, Mediterráneo occidental, a 18 de abril de 2013

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Contra la celebración del 28 de febrero y en apoyo de la manifestación convocada por el Bloque Crítico

MAIS

 

Desde el Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista (MAIS), consideramos que el 28 de febrero de 1980, con la celebración del referéndum en el que se nos consultaba acerca del procedimiento preferido para acceder al proceso autonómico, se culmino el mayor acto de traición y embaucamiento perpetrado contra el Pueblo Trabajador Andaluz en los últimos decenios. El iniciado con otro referéndum, el de aprobación de la Constitución Española del 78. Aquel día, los trileros de la política nos cambiaron el autogobierno exigido el 4 de diciembre del 77, el derecho a ser nuestros dueños y los de nuestra tierra, por mera descentralización.

El 28-F no conquistamos nada, sólo nos ganamos el que se nos fuese concedido un sucedáneo de autogobierno, la autonomía, que conllevaba exclusivamente una delegación limitada de la gestión de una parte de las competencias del Estado Español. Lo que estaba en juego aquel 28 de febrero no era nuestro reconocimiento como pueblo ni como nación, y en consecuencia la recuperación de nuestra capacidad colectiva de autogobernarnos, nuestra soberanía, sino el tipo de competencias delegadas y el grado de capacidad de su gestión, según optásemos por la “autonomía de primera”, a través del artículo 151, o por la “vía lenta” del artículo 143.

Aquel 28 de febrero los andaluces y andaluzas nada logramos porque nada se podía conseguir. El marco constitucional surgido de la reforma de las instituciones franquistas, y por tanto de su continuidad, plasmado en la Constitución estatal en vigor, no admite ni permite admitir una nación andaluza, no reconoce ni posibilita el reconocimiento al pueblo andaluz y no devuelve ni ampara la devolución de nuestra libertad colectiva, de la soberanía nacional a Andalucía y la soberanía popular a los/as andaluces/zas. Aquel 28 de febrero, en cambio, si perdimos mucho; la posibilidad de contar con instrumentos reales para acabar con la dependencia y volver a ser libres. De ahí que desde unos postulados coherentemente nacionales y revolucionarios, los 28 de febrero no haya motivos para la celebración, si en cambio muchos para mantener la lucha.

Andalucía sólo tiene un día, el 4 de diciembre, su Día Nacional. La fecha que rememora aquella jornada en que el pueblo trabajador andaluz se hecho masivamente a la calle manifestando su voluntad de volver a ser, como reivindica nuestro himno. Aquella en que nos manifestamos en un gesto multitudinario de auto reconocimiento y de exigencia de nuestros derechos. El 28 de febrero ni es el Día de Andalucía ni una festividad para los/as andaluces/zas conscientes, sólo es el día de aquellos que acatan o defienden este “marco constitucional” y su “autonomía”, contribuyendo con ello a la perpetuación de nuestra negación como país y el mantenimiento del secuestro de nuestra soberanía. La Andalucía dependiente, expoliada y alienada de estos últimos decenios no es consecuencia de un determinado partido, actuación o normativa, está implícita en la constitución española y los estatutos de autonomía, y el 28-F la simboliza.

El 28 de febrero no es una fecha para festejar sino para combatir. Una Jornada de lucha por nuestra libertad y contra todas las agresiones que sufrimos por parte del Sistema. Un día para batallar contra España, el Capital, el Estado impuesto y su sucursal autonómica: la Junta de la Dependencia Andaluza. Ésta es la razón de que el MAIS haya decidido integrarse en el Bloque Critico y de que apoyemos la manifestación convocada por éste para ese día en Sevilla. El que tanto la plataforma como el acto propuesto poseen esas características de confrontación y reivindicación. Pero lo hacemos desde posicionamientos diferenciados e igualmente críticos.

Somos plenamente conscientes de que una tipología de unidad de acción en la lucha tan amplia como la representada por el Bloque, no puede sobrepasar unos mínimos asumibles por todos, pero esos mínimos no deben quedar limitados exclusivamente a metas cortoplacistas y por propuestas coyunturales. Deben aspirar también a rebasar el marco económico, social y político impuesto, si realmente pretenden ir a la raíz de las problemáticas para solventarlas.

Movilizar a las clases populares andaluzas contra todos los recortes, tanto los del gobierno estatal del PP como los del gobierno de la Junta del PSOE e IU. Defender el no al pago de la deuda, la defensa de unos servicios públicos, el pleno empleo, el reparto del trabajo sin una reducción salarial, el medio ambiente, el derecho a la vivienda y los de igualdad, incluso otros objetivos más ambiciosos como la nacionalización de la banca, la salida de la OTAN, la defensa de medidas de profundización democrática, la liberación de presos, la autodeterminación de los pueblos y la abolición de la monarquía, no resultan suficientes sin plantearse, más allá de una mención genérica, la denuncia de la opresión nacional, el expolio social y la explotación obrera. Sin incluir y proponer la recuperación de las libertades, del poder popular, los derechos de los pueblos, la erradicación de la esclavitud asalariada y sobrepasar la economía capitalista.

Comprendemos que no sería razonable exigir un programa común nacional y revolucionario entre colectivos que no todos compartirían ni tendrían porque asumir, pero si un proyecto radicalmente democrático. Que contenga retomar el concepto de la ruptura democrática, y se asiente sobre el principio de la superación de los límites del régimen surgido de la transición, y el establecimiento de unas nuevas bases políticas que rebasen las restricciones y no mantenga las imposiciones de éste: la supeditación al “libre mercado” y la obligatoriedad del Estado único. Ese capitalismo y esa España que constituyen los pilares conformadores del Sistema. No obstante, entendemos que estas aspiraciones son alcanzables y plasmables en un futuro, por lo que mantenemos un criterio favorable al Bloque Crítico, a nuestra participación en él y a su utilidad como marco de actuación en defensa de los intereses del Pueblo Trabajador Andaluz.

Queremos mostrar nuestra repulsa y profundo rechazo a todos los que amparados en falsos criterios de unidad y/o de eficacia, forman parte de la Plataforma Compromiso Social para el Progreso o se unen a sus actos, como sus manifestaciones del próximo 28-F. Una plataforma patrocinada por la Junta, los partidos gubernamentales (PSOE-IU) y los sindicatos al servicio del poder (CC.OO. y UGT), y cuyos fines reales son mantener el statu quo. Una Andalucía negada, ocupada, expoliada, dependiente y subdesarrollada. Un Pueblo Trabajador Andaluz sometido, oprimido, alienado y sin identidad. Una clase obrera indefensa, desposeída y explotada.

Desde el Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista (MAIS) hacemos un llamamiento a todos los militantes y simpatizantes de la Izquierda Soberanista, a todos los revolucionarios andaluces, a participar en la manifestación alternativa convocada en Sevilla el 28-F por el Bloque Critico, y a sumarse a cuanta otra actividad sea realizada o promocionada por él.

¡Viva Andalucía libre y socialista!

En Andalucía, a 25 de Febrero de 2013

Mesa Nacional del MAIS
maisnacional@gmail.com

Manifiesto Fundacional del Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista

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MANIFIESTO FUNDACIONAL DEL MAIS

ANDALUCÍA, UNA NACIÓN OPRIMIDA

Andalucía constituye una nación, es decir, una comunidad humana, el pueblo andaluz, que se ha ido desarrollando y diferenciando a lo largo de la Historia sobre un territorio específico, nuestra tierra, y que presenta toda una serie de características singulares en sus diversos aspectos vitales: cultural, lingüístico, social, político, económico, etc.

La Andalucía contemporánea se ha venido desarrollando históricamente desde la conquista de Al Ándalus por parte de los reinos del Norte de la Península Ibérica y de la ocupación por el castellano, como un pueblo oprimido y una nación colonizada, un país del que potencias extranjeras se han servido y aprovechado dejando a Andalucía y los andaluces en el subdesarrollo forzoso y la dependencia política. Esta situación de subdesarrollo y dependencia se agravó aún más con la introducción del modo de producción capitalista en los restos del Imperio, ya reconvertido en el Estado Español durante el siglo XIX, quedando Andalucía en una situación de mayor marginalidad si cabe, con una gran burguesía terrateniente, esencialmente foránea, que debido a sus características coloniales e intereses agrarios impidió sistemáticamente el desarrollo económico y social andaluz, facilitándolo en otros lugares del Estado Español.

En la división de funciones adjudicadas a los territorios bajo el yugo del nuevo Estado, expresión geopolítica del imperialismo capitalista, a unos países reducidos a regiones administrativas, a Andalucía le asignan el papel de colonia interior asentado sobre una economía primaria extractiva y sobre el latifundismo, limitado a proporcionar materias primas y mano de obra barata. En este contexto, la falta de industrialización y los altos índices de paro son estructurales, ideados e inducidos por el Sistema como parte de esta conformación subsidiaria. Por ello, el pueblo trabajador andaluz está sometido a una doble opresión. A la explotación capitalista por burgueses, monopolios y oligarcas, se suma el colonialismo interno que deforma su economía y nos convierte en meros suministradores de obreros, servicios, turismo y productos agrarios baratos para otras zonas del Estado y Europa. En el caso de la mujer a una triple, sumando la patriarcal.

Ni que decir tiene que al expolio económico le siguió un expolio cultural e identitario que trajo consigo la total manipulación de las señas de identidad andaluzas, siendo presentadas, tras remodelarlas, como la “esencia de la españolidad” por el gran capital español, para amparar y justificar la existencia de éste falso Estado-nación, dotándole de un supuesto común étnico-cultural y, por otro lado, para facilitar esta relación opresiva y explotadora centro-periferia, por lo que desde el Estado se ridiculiza sin piedad, se vacía de contenido y tergiversa la cultura andaluza, así como su modalidad lingüística, para infundir sentimientos de inferioridad que contribuyan al sometimiento.

LA LIBERTAD, DERECHO Y NECESIDAD POPULAR

Hoy, en un contexto de profunda crisis del modo producción capitalista, un país como Andalucía se ve aún más desprotegido ente las decisiones de los grandes centros de poder internacionales, de las decisiones de grandes multinacionales y de los Estados imperialistas debido a la carencia de poder para decidir. Por ello, las consecuencias de esta crisis para un país como Andalucía son aún más graves, como así lo demuestran todas las estadísticas que consultemos. Ante esto, la clase obrera y el conjunto de sectores populares andaluces trabajadores se han de defender. Pero para hacerlo han de poseer capacidad política y jurídica que lo posibilite. Recuperar y utilizar su derecho a la soberanía nacional, a disponer de su tierra, sus riquezas, su trabajo y su cultura, creando instituciones libres y soberanas propias, verdaderamente democráticas y capaces de estar a su exclusivo servicio y de satisfacer todas sus necesidades.

Como toda nación y pueblo, Andalucía y el pueblo andaluz poseen derecho a detentar y ejercer su libertad, su soberanía nacional y popular. Esta soberanía no se concede o se elige, nos pertenece por derecho propio. Pero en nuestro caso, la lucha por nuestra soberanía no es sólo una cuestión de principios y libertades, sino una necesidad social y económica prioritaria. Sólo con la construcción de un poder soberano andaluz al servicio del conjunto del Pueblo Trabajador Andaluz podremos hacer frente con éxito a la crisis del capitalismo. Sólo creando las bases de un modo de producción en que lo común y lo colectivo estén por encima de intereses explotadores e individuales, asegurando que cada ser humano pueda existir y desarrollarse libremente, podremos asegurarle al Pueblo Trabajador Andaluz el futuro de paz, justicia y libertad que se merece. Liberación nacional y social forman parte del mismo combate emancipador.

Frente a aquellas teorías ilusorias que aspiran a una “revolución simultánea” en todo el planeta, defendemos que el verdadero internacionalismo consiste en empezar la revolución en tu propia tierra, en el entorno de tu propia realidad. Sabemos, además, que la liberación nacional es un requisito previo imprescindible para emprender la liberación social, la edificación de una sociedad socialista y de una democracia popular. La lucha de liberación nacional, desde parámetros revolucionarios, no excluye sino que incluye la solidaridad y el internacionalismo de clase y entre pueblos. Sólo desde un poder obrero y popular soberano andaluz podremos contribuir a una nueva realidad internacional en la que pueblos y trabajadores del mundo podamos convivir en paz y hermandad, en la unidad y el apoyo mutuo desde la libertad, haciendo realidad nuestro himno: “Sea por Andalucía libre, los pueblos y la Humanidad”.

LA SOBERANÍA COMO ALTERNATIVA REVOLUCIONARIA

En mitad de esta situación, destaca la existencia de una izquierda desarticulada y acomplejada, incapaz de ver más allá de las instituciones del Sistema. De denunciar sin ambigüedades al régimen y a sus instrumentos del poder continuista, españolista y capitalista. Que carece de programa propio y está a rémora de la falsa “izquierda” del régimen; el PSOE, IU, CC. OO. y UGT. Incapaz de actuar de una forma autónoma y coherente con respecto a ella y al propio Sistema. El electoralismo barato, que lleva a la izquierda “alternativa” a presentarse a cuanto proceso electoral coloca delante de sus ojos el régimen, es sólo otra manifestación de la falta de independencia política de dicha izquierda, incapaz de diseñar un calendario político propio. De ser vanguardia, en lugar de “cola crítica” y meros teloneros de la pseudo “izquierda” colaboracionista.

También la de un nacionalismo andaluz igualmente deslavazado y acobardado, que no ha sabido superar las bases regionalistas, españolistas e interclasistas insufladas por ese falso “andalucismo” representado por el PA y todos aquellos que han traicionado a Blas Infante, arrebatándole a su ideario lo que contiene de libertador y revolucionario, transformándolo en un sucedáneo inicuo asumible por el régimen, que se adapta a los intereses del sistema y se convierte en otro instrumento para mantener la alienación identitaria, la explotación económica, la subordinación política y la opresión nacional de nuestro pueblo. Ese “andalucismo” que en lugar de luchar por el reconocimiento nacional de Andalucía acepta un “marco constitucional” que lo excluye y lo imposibilita. Que en lugar de combatir por recuperar la soberanía andaluza acata un Estado que se la apropia y se la impide. Que en lugar de propugnar y propagar el ejercicio de su autogobierno por los andaluces defiende una “autonomía” que lo niega, sustituyéndolo por una mera concesión de delegación de ejecución de competencias del Estado.

Mientras la Junta de la Dependencia de Andalucía, gobernada por la coalición PSOE IU, fieles a sus amos españoles y burgueses, recorta sin cesar derechos que tanta sangre costaron obtener al pueblo trabajador andaluz, la izquierda y el nacionalismo domesticados echan la culpa al gobierno central del PP. Con la excusa de “sumar fuerzas”, “no ser sectarios” y “la excepcionalidad del momento”, comparten pancarta y manifestación “anti-recorte” y “alternativas”, con los mismos partidos que igualmente recortan desde la Junta, y con los mismos sindicatos que los apoyan y forman parte del poder. Con esos mismos políticos que firmaron la congelación de las pensiones que perciben los obreros de los distintos pueblos de este Estado impuesto tras toda una vida dedicada al trabajo, entre otras muchas imperdonables traiciones. Con esos mismos sindicalistas que llevan décadas colaborando en la destrucción de empleos, disminuciones de salarios y restricciones en derechos laborales y sociales.

Esa izquierda y ese andalucismo inconsecuentes, apoyos del régimen y sus teloneros que, como IU y el PA, en lugar de defender la reconstrucción nacional andaluza y el autogobierno que exigía nuestro pueblo el 4-D, apoya una Constitución continuista y un Estatuto de Autonomía que sólo es descentralización administrativa. Que mantiene nuestra dependencia nacional, la alienación social y la explotación popular. Esos que ahora se parapetan en la queja de que los recortes “vengan impuestos” por Madrid, el FMI o Maastrich, para justificar su entreguismo y subordinación al Sistema, es la misma izquierda y el mismo andalucismo que, como ciertos movimientos sociales, han abandonando el verdadero internacionalismo y el socialismo, defendiendo el proyecto capitalista del “Estado del bienestar”, a pesar de que dicho “bienestar” fuera edificado gracias al excedente obtenido por el imperialismo con el saqueo del “Tercer Mundo”, y que sólo es sostenible sobre la base de la continuidad del saqueo. Un “bienestar” que se ideó y mantuvo, no como vía de igualación o justicia social, sino como espejismo que impidiese un avance hacia el socialismo. Un reparto de migajas, apariencias de democracia y equidad, que ya no le son necesarias al Capital tras la “caída del muro”.

Esa misma izquierda y nacionalismo inconsecuentes que, como algunos de esos auto-denominados como “anticapitalistas” y “antiimperialistas”, aplaudieron las invasiones de la OTAN en los territorios del Estado Yugoslavo o el Libio, y ahora la agresión genocida contra el Sirio o la ocupación de Azawad, acatando servilmente las versiones del sistema que las disfraza de “revoluciones populares” o de “luchas antiterroristas”. Esos que creen que la lucha contra el imperialismo se reduce a pasear una vez al año hasta las inmediaciones de las Bases. Esos que, al igual que ciertos movimientos sociales, han abandonado el auténtico internacionalismo y la solidaridad entre pueblos y se han transformado en altavoces propagandistas de los argumentos imperialistas.

Frente a estas izquierdas y nacionalismos colaboracionistas y entreguistas, se impone la necesidad de una izquierda andaluza, coherentemente rupturista con el régimen, su marco político, social y económico, sus instituciones y organizaciones sustentadoras. Que niegue sus bases: democracia representativa, autonomía, libre mercado y estado del bienestar; contraproponiéndoles democracia directa, soberanía, socialismo y poder popular, y combata al Sistema levantando la bandera de la liberación nacional y social.

LA INDEPENDENCIA Y EL SOCIALISMO COMO METAS

Pese a todo lo expuesto, sigue sin existir un referente político en Andalucía, que por su carácter amplio, unitario, soberanista, de clase, extra-institucionalista y popular, sea capaz de generar un contrapoder popular andaluz, que enfrente con éxito al Estado Español en la perspectiva de construir una vía andaluza hacia el socialismo. Como consecuencia, surge la necesidad de aunar fuerzas y esfuerzos en esta dirección. De ahí que nosotros; obreros/as, parados/as, estudiantes de clase trabajadora, andaluzas y andaluces conscientes y de conciencia, anticapitalistas sin complejos, militantes de organizaciones políticas e independientes, revolucionarios sin cortapisas, constituimos este movimiento común para rellenar ese vacío organizativo existente en Andalucía.

En contraposición a izquierdas y andalucismos que amparan, justifican y forman parte del régimen, con sus políticas institucionalistas y su actividad institucionalizada, que contribuyen al mantenimiento de la subordinación y adormecimiento popular, militantes de diferentes organizaciones e independientes no organizados hemos decidido crear este frente de unidad de acción estructurada, para edificar un bloque político unitario, coherentemente andaluz y anticapitalista, radicalmente soberanista y revolucionario, transformador de la realidad de nuestra tierra, con vocación de contribuir mediante él a la construcción de un poder popular andaluz, al margen y contra las instituciones del Estado Español y la burguesía, y cuyas únicas metas sean alcanzar la independencia nacional y social, sentando las bases de una revolución socialista en nuestro país.

Contra el reformismo y el españolismo, contra los partidos y sindicatos vendidos. Por una izquierda andaluza revolucionaria: soberanista, anticapitalista, antiimperialista y antipatriarcal.Que luche por una República Andaluza al servicio del pueblo trabajador andaluz. Porla liberación nacional y social, construyendo un poder andaluz de carácter popular, soberano y socialista, acabando con el marco estatal y constitucional actual; su “autonomía” e instituciones burguesas “representativas”, con el sistema capitalista y las políticas imperialistas, abandonando la Unión Europea, el Euro y la OTAN.

Como andaluces y como revolucionarios, nos levantamos por la tierra y por la libertad, como nos reclamaba Blas Infante. Vengaremos siglos de opresión contra el pueblo trabajador andaluz, y no cejaremos hasta lograr destruir las cadenas de la esclavitud española y capitalista que imposibilitan la existencia de una Andalucía libre. Con estos fines se ha funda el Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista, con la misión de dinamizar políticamente un amplio movimiento popular que luche consecuentemente por estos objetivos.

FINES Y ESTRATEGIAS DEL MAIS

FINES

El Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista (MAIS), se propone, como fines últimos, hacer realidad una Andalucía independiente y socialista. La plena liberación nacional y social del Pueblo Trabajador Andaluz. Estos fines se concretizarán mediante las siguientes metas:
1º) La Superación del marco político, jurídico y constitucional actual. Lograr en Andalucía una ruptura democrática global con el régimen continuista, postfranquista, españolista y capitalista actual; su Estado, constitución, autonomismo e instituciones administrativas.

2º) La instauración de un periodo transitorio y constituyente propio en nuestro país, que incluya el previo reconocimiento de Andalucía como nación y de los andaluces como pueblo, con la consiguiente restitución de nuestra soberanía nacional y popular, de una forma completa, inmediata e incondicional. Que conlleve la institucionalización de nuestro derecho a decidir, del derecho de autodeterminación permanente del pueblo trabajador andaluz.

3º) Lograr que el proceso culmine con la proclamación de una República Andaluza. Una república libre y soberana, de características democrático-populares, que instaure un poder popular andaluz efectivo mediante prácticas de democracia horizontalista y directa, y que asegure a través de la misma la preeminencia de los intereses sociales colectivos sobre los particulares, así como una plena capacidad popular de decisión y de control sobre la totalidad de las estructuras políticas y administrativas del país.

4º) La edificación en dicha República Andaluza de una economía socialista, destinada y supeditada a cumplimentar las necesidades sociales y colectivas, y no al consumismo o al lucro personal, mediante la planificación popular de sus líneas maestras, así como de la nacionalización de la tierra y de las aguas, de los recursos naturales (agrícolas, ganaderos, piscícolas, mineros, fluviales. etc.), de los industriales, energéticos, comerciales, constructores, de locomoción, financieros, bancarios, etc. De todos aquellos necesarios para asegurarle una existencia digna, equitativa, igualitaria y libre al Pueblo Trabajador Andaluz.

5º) La práctica efectiva y cotidianizada por dicha la República Andaluza de la solidaridad y el internacionalismo entre los pueblos trabajadores, apoyando con todos los medios a su alcance las luchas soberanistas, antiimperialistas, anticapitalistas y antipatriarcales en el resto del Planeta. Impulsando la creación de estructuras internacionales estables de apoyo muto e interrelación global, tanto políticas, como sociales, económicas y culturales.

ESTRATEGIAS

Para ir creando las condiciones que hagan posible alcanzar las metas propuestas e ir, a un tiempo, aumentando el nivel de concienciación y de lucha popular, nos proponemos:

1º) La construcción de un gran bloque socio-político amplio, que asuma la necesidad de rebasar el marco legal constitucional y autonómico. Que reclame, conciencie y trabaje por la recuperación de la soberanía nacional y popular del Pueblo Trabajador Andaluz, como tarea prioritaria para poder superar las distintas problemáticas sociales y económicas.

2º) Denunciar sin cortapisas a todos aquellos colectivos y estructuras de poder burgués y español, que disfrazadas de organismos y organizaciones “andaluzas”, de “izquierdas”, “obreras” o de “revolucionarias”, solo sirven a los intereses del gran capital español y al mantenimiento de la dependencia y la alienación de nuestro pueblo, estando marcados por el mismo españolismo, el mismo reformismo, el mismo social-fascismo cómplice y la misma traición andaluza y de clase del PA, el PSOE, IU, el PCE, etc. Combatir toda idea o proyecto de “unidad andalucista” interclasista o de “unidad de la izquierda” entre estas falsas “izquierdas” con la auténtica izquierda andaluza; la soberanista y revolucionaria.

3º) Impulsar al Sindicato Andaluz de Trabajadores/as, para que llegue a convertirse en la gran central untaría de la clase obrera andaluza, así como fortalecer el sindicalismo revolucionario, asambleario, de base y opuesto a la burocracia sindical entreguista, vertical y amarilla, de estructuras sindicales al servicio del poder burgués, como CC. OO., UGT o CSIF, mediante la defensa y la construcción de un bloque sindical alternativo que suponga y conlleve la unidad de acción en la lucha del sindicalismo de clase andaluz, y combatiendo cualquier idea o intento de “unidad sindical” o de actuación, entre el SAT y/o el resto del sindicalismo de clase y los del régimen: “mayoritarios”, “independientes” y “profesionales”.

4º) Reforzar y promover la conciencia nacional andaluza, rescatando nuestra identidad frente a toda usurpación cultural por parte del imperialismo español, como el medio para impulsar la concienciación colectiva popular, a través de la potenciación de un gran bloque asociativo cultural, identitario y de recuperación de nuestra memoria histórica, conformado mediante la coordinación de los centros andaluces, ateneos populares y otros colectivos similares, así como del impulso de medios de contrainformación andaluza y revolucionaria.

5º) Generar poder popular andaluz, auto-organización obrera y tejido social autónomo, con una línea de actuación en las poblaciones, barrios y puestos de trabajo, que impulse tanto el protagonismo popular y obrero como su activación política, defendiendo la acción y la democracia directa, haciendo con ello que las clases populares peleen, por y para ellas, al margen de “representantes” sustituidores y contra las instituciones del régimen, concebidos como métodos de concienciación y confrontación anticapitalistas y antiestatalistas.

6º) Fortalecer la autodefensa popular, frente a la constante represión y los montajes del Estado fascista español contra todos aquellos militantes o luchadores sociales que ponen en cuestión el engranaje institucional heredero y continuador del régimen fascista, mediante la concienciación popular y el impulso de coordinadoras antirepresivas. Luchar asimismo por la libertad de todos los presos políticos y represaliados del sistema imperialista y capitalista, no solamente andaluces, sino del resto de pueblos del mundo.

7º) Impulsar estrategias que conlleven rebasar los límites impuestos por el capitalismo, incitando a la autogestión y el activismo socioeconómico popular y obrero: promoviendo la ocupación de fincas, fábricas y edificios, la detención de desahucios, la expropiación de medios y recursos, el cooperativismo económico-social, la autosolidaridad para solucionar carencias y necesidades inmediatas, y cualquier otra experiencia alternativa al Sistema.

8º) Defender la propagación de un ecologismo andaluz y anticapitalista, que parta de la subordinación de uso del territorio: de la tierra, el subsuelo, el litoral y las aguas del país, al interés comunitario. Propugnar un desarrollo compatible con la conservación, la protección y la regeneración del medio ambiente y las especies autóctonas, así como de la utilización de materiales y formas de explotación no agresivas con el medio ni los seres humanos. Lograr una Andalucía sin energía atómica; que no la cree, utilice o almacene sus residuos.

9º) Luchar por acabar con la sociedad patriarcal, machista y sexista impuesta a Andalucía, erradicando cualquier tipología y combatiendo toda formulación de discriminación por razón de género u opción sexual. Potenciando movimientos auto-organizados feministas y LGTBIde liberación, desde parámetros antisistema y dentro de marcos andaluces.

10º) Erradicar el fascismo, el racismo, la xenofobia y el españolismo en Andalucía, desdela conciencia internacionalista y de clase de que trabajador andaluz es todo aquel que vive y trabaja en Andalucía, independientemente de su lugar de origen y procedencia, así como de su documentación. Defender y concienciar de la equivalencia de todas estas filosofías reaccionarias y de la necesidad de confluencia y coordinación en un mismo movimiento y una misma lucha del activismo antifascista, antirracista y antiespeñolista de nuestro país.

11º) Pelear por una Andalucía de paz, desmilitarizada y desnuclearizada, defendiendo la eliminación de la presencia de ejércitos y armamento militar del país, y el desmantelamiento de las bases militares del imperialismo otánico en suelo andaluz, para no padecer ni ser cómplices de la ocupación, explotación, saqueo y agresiones a otros pueblos o al nuestro, impulsando la lucha contra las bases extrajeras: españolas, estadounidenses y británicas impuestas, y por su desaparición, a través de plataformas antimilitaristas y anti-bases.

12º) Solidarizarnos sin complejos con los gobiernos revolucionarios o antiimperialistas existentes. Denunciar cualquier supuesta “revolución”, “democratización” o “primavera” promovida por el imperialismo contra los pueblos trabajadores, como ha sucedido en Libia, Siria o Irán, impulsando plataformas antiimperialistas y anticolonialistas.

13º) La defensa del derecho de todos los pueblos y de todas las naciones del mundo a la plena posesión y el libre ejercicio de sus soberanías e independencias, mostrando nuestra oposición a su ocupación, pertenencia a un estado impuesto, colonización y explotación de sus recursos por terceros, así como a la negación de sus derechos a la autodeterminación.

¡Viva el Pueblo Trabajador Andaluz!
¡Viva Andalucía libre y socialista!
¡Viva el Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista!

Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista (MAIS): maisnacional@gmail.com

Fundado el Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista (MAIS)

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Tras cerca de dos años de confluencia política, sincronización estratégica y trabajo común cotidianizado, los colectivos e independientes que conforman la Mesa Andaluza de la Izquierda Soberanista, han acordado constituirse en un frente de unidad de acción estructurado. En el Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista (MAIS).
 
El 10 de abril de 2011, en la ciudad de Córdoba, cuatro colectivos de la izquierda soberanista andaluza: Andalucía Comunista, Juventud Independentista Revolucionaria Andaluza, Jaleo!!! y Nación Andaluza, fundaban la Mesa Andaluza de la Izquierda Soberanista, una coordinadora que nacía con la vocación de aunar fuerzas y esfuerzos en torno a “la defensa de los derechos, libertades e intereses sociales y políticos de las clases populares de nuestro país”.  Con tal motivo se firmó una declaración de principios que contenía tres puntos concretos básicos e irrenunciables en los que sintetizábamos nuestros objetivos:
 
1º Lograr una ruptura democrática global con el régimen político continuista actual: su Constitución, su autonomismo y sus instituciones.
 
2º La instauración de un periodo transitorio y constituyente propio, que deberá incluir el previo reconocimiento de Andalucía como nación y de los andaluces como pueblo, así como la consiguiente restauración de nuestra soberanía nacional y popular, de una forma completa, inmediata e incondicional.
 
3º La proclamación de una República Andaluza. Una república propia, de características democrático-populares, en la que se asegure la preeminencia de los intereses colectivos sobre los particulares, garantizando la supremacía de los de las clases populares andaluzas. 
 
Tras más de un año de trabajo en común, al que se incorporó una nueva organización, Red Roja Andaluza, así como numerosos soberanistas revolucionarios andaluces a título individual, la Mesa decidió dar un paso adelante y profundizar en el marco unitario de actuación, como forma de dotarnos de una estructura capaz de  hacer realidad los tres puntos referidos. En Junio de 2012 se iniciaron los encuentros y debates con vistas a posibilitar esta nueva meta. Un proceso que ha concluido este día 10 en Málaga, con la  aprobación de la constitución del Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista, así como de los dos documentos base sobre los que se conforma: el Manifiesto Fundacional y el de Fines y Estrategias del MAIS.
 
El Movimiento nace de la constatación, como afirmamos en el Manifiesto Fundacional,  de “la inexistencia de un referente político en Andalucía, que por su carácter amplio, unitario, soberanista, de clase, extra-institucionalista y popular, sea capaz de generar un contrapoder popular andaluz, que enfrente con éxito al Estado Español en la perspectiva de construir una vía andaluza hacia el socialismo”. De la necesidad de configurar “un bloque político unitario, coherentemente andaluz y anticapitalista, radicalmente soberanista y revolucionario, transformador de la realidad de nuestra tierra, con vocación de contribuir mediante él a la construcción de un poder popular andaluz, al margen y contra las instituciones del Estado Español y la burguesía, y cuyas únicas metas sean alcanzar la independencia nacional y social, sentando las bases de una revolución socialista en nuestro país”. Un movimiento carente de ambigüedades ideológicas amparadas en el “realismo”, traiciones programáticas embozadas de “moderación” y oportunismos cortoplacistas maquillados como “participaciones” y “candidaturas”, y cuyo único fin, declarado sin ambages, es: “hacer realidad una Andalucía independiente y socialista. La plena liberación nacional y social del Pueblo Trabajador Andaluz”.
 
Reiteramos el llamamiento ya efectuado hace dos años al resto de las fuerzas políticas, de los colectivos sociales y de las individualidades de la Izquierda Soberanista Andaluza, a todos los revolucionarios andaluces,  a formar parte de éste proyecto y organismo de actuación unitaria y conformación organizada del movimiento de liberación nacional  andaluz. A unirse al Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista (MAIS) para continuar con la lucha por la tierra y la libertad,  por la independencia nacional y la revolución socialista en Andalucía. La emprendida por Blas Infante. Aquella por la que vivió y dio su vida.
 
¡Viva Andalucía Libre y socialista!
 
Mesa Nacional del MAIS
Movimiento Andaluz de la Izquierda Soberanista (MAIS): maisnacional@gmail.com

Marcha del Sindicato Andaluz de Trabajadores/as (SAT) contra la represión

marcha represión

 

Como ya sabéis la represión contra nuestro sindicato cada vez es más fuerte, son ya más de 500 procesados y procesadas, nos reclaman 400.000 euros en multas y 50 años de cárcel teniendo pendiente aún juicios como el de Mercadona y los de los 40 detenidos y detenidas durante las marchas obreras Andalucía en Pie, lo que nos pondrá en 70 años de cárcel, medio millón de euros y acercarnos a los 600 sindicalistas metidos en procesos judiciales.

El SAT ya ha pagado cerca de 200.000 euros en multas. El Gobierno intenta así estrangular económicamente al sindicalismo andaluz de clase para impedir el desarrollo de esta herramienta de lucha en manos de la clase trabajadora y el pueblo andaluz.

Por todo ello hemos considerado que es hora de hacer una gran movilización que denuncie la represión que estamos sufriendo. Somos el sindicato más represaliado de Europa y esto hay que hacerlo saber.

Hemos escogido el día 11 de Enero por ser una fecha señalada por la represión, ya que un 11 de Enero se produjeron los asesinatos de Casas Viejas. Hoy como ayer, el mundo trabajador es perseguido, ayer con balas y hoy con multas millonarias y penas de cárcel.

Os pedimos no solo que participéis personalmente en esta movilización sino que llaméis a la rebeldía en vuestro entorno para que seamos miles los que llevemos nuestras banderas y nuestras consignas hasta las puertas de la cárcel de Morón.

4 de diciembre, Día Nacional de Andalucía

málaga

 

35 años después Andalucía sigue en pié por sus derechos

El 4 de diciembre de 1977, dos millones de andaluces y andaluzas salieron a las calles de las ciudades y pueblos de nuestro país, tanto en un acto de auto reconocimiento y reafirmación como pueblo como en reivindicación de nuestros derechos democráticos individuales y colectivos. Un término lo resumía todo: autogobierno. La posesión de la capacidad de decidir libremente la dirección de nuestro destino y el de nuestra tierra.

Se nos dijo entonces que dicho derecho estaría garantizado en la Constitución estatal mediante el llamado Estado de las autonomías. Que acceder a esa autonomía prevista dentro del marco constitucional, a través del artículo 151, conllevaría el reconocimiento de nuestra nación y de nosotros como pueblo, y que supondría igualmente detentar el ansiado autogobierno. Esas fueron las razones que hizo al pueblo andaluz acudir tan masivamente al referéndum del 28 de febrero de 1980 y votar el sí en la consulta.

La izquierda soberanista andaluza lleva años denunciando la falacia autonómica. Que el Estado autonómico no es más que la descentralización de la gestión administrativa del Estado Español. Que la Constitución y los estatutos de autonomía no reconocen ni permiten el reconocimiento de nuestro país ni del Pueblo Andaluz. Que la Constitución y los estatutos de autonomía no reconocen ni permiten reconocer nuestro derecho a la posesión y el ejercicio de un autogobierno real, pleno, efectivo y permanente. Que, por tanto, la autonomía no es un instrumento de transformación política y social sino una mera herramienta de perpetuación de la dependencia y el subdesarrollo inducidos.

Han pasado ya treinta y cinco años, dos estatutos y varias “modernizaciones”, y en lo esencial estamos donde estábamos. Andalucía permanece en el furgón de cola entre los distintos pueblos peninsulares e insulares. Continuamos siendo los últimos en todos los índices de desarrollo económico y bienestar social. Solo somos los primeros en paro y precariedad, en pobreza y carencias. Y ahora, La crisis-estafa originada en la rapiña del capital especulativo financiero, mantenida y ampliada por el sistema capitalista como método para justificar el mayor ataque a los ya de por sí escasos derechos democráticos, sociales y laborales de las clases populares, no hace más que agravar situaciones nunca desaparecidas, sólo amortiguadas. Además, esta crisis-estafa está mostrando y demostrando la veracidad de la afirmación mantenida por la izquierda soberanista acerca de la inexistencia de autogobierno real. Las grandes decisiones, las líneas de actuación en materia política, económica, social, etc., no se deciden ni pueden ser decididas aquí, nos vienen impuestas desde Madrid o Bruselas. La misma Junta justifica sus recortes en que se ven obligados a ello “por imperativo legal”, en lo que constituye un implícito e innegable reconocimiento de las obligadas e insalvables limitaciones jurídicas, legislativas y ejecutivas, no ya de nuestra supuesta autonomía, sino del propio marco constitucional y del sistema autonómico vigente.

Estas limitaciones e incapacidades intrínsecas de las que adolecen la Constitución y el llamado Estado de las autonomías, suponen el que las alternativas no puedan consistir en mejoras o reformas más o menos amplias de este marco constitucional o el sistema autonómico. Toda alternativa que aspire a la transformación de la realidad andaluza debe asentarse en la superación de ambos y su sustitución por otros que contengan los basamentos políticos y jurídicos que permitan el autogobierno del pueblo andaluz. Que descansen sobre el reconocimiento de Andalucía como nación, de los andaluces como pueblo, y del derecho inalienable que pertenece a todas las naciones y pueblos a ser sus propios dueños. Del derecho a auto gobernarse. A ser naciones y pueblos libres. Y ese derecho a ser y decidir de naciones y pueblos se denomina soberanía. Sólo una Andalucía que recupere su soberanía nacional y unos andaluces y andaluzas que detenten su soberanía popular estarán en condiciones de decidir y actuar por ellos y para ellos mismos. Solos siendo nuestros propios dueños, los únicos determinadores activos de nuestro presente y nuestro futuro, en lugar de los padecedores pasivos de las decisiones que otros tomen en nuestro lugar, estaremos en condiciones de hacer frente con éxito a la crisis-estafa y a los envites antisociales del sistema capitalista.

Por todo lo expuesto, hoy y aquí, en el 4 de diciembre, Día Nacional de Andalucía, y en el mismo lugar en que hace treinta y cinco años un andaluz, Manuel José García Caparros, fue asesinado por defender nuestros derechos y nuestra bandera, el conjunto de la izquierda soberanista andaluza nos reafirmamos en el compromiso para con nuestro pueblo de perseverar en la lucha por una Andalucía plenamente libre. Hoy y aquí manifestamos que esta afirmación no puede quedar en una proclamación de intenciones, sino que debe concretizarse en un movimiento popular reivindicativo, amplio, decidido y unitario, como hace 35 años. Por ello, hacemos un llamamiento público a las distintas organizaciones políticas, colectivos sociales y ciudadanos andaluces conscientes y concienciados con la necesidad de construir esa Andalucía libre de hombres y mujeres libres, a través de la devolución del ejercicio del poder y el protagonismo a nuestro pueblo, a aunar fuerzas y esfuerzos en torno a este objetivo común y básico: la recuperación de nuestra soberanía nacional y popular, colectiva e individual. A dar los primeros pasos firmes hacia la más completa superación de este régimen continuista corrupto y obsoleto, propiciando la ruptura democrática y el inicio de un nuevo periodo transitorio y constituyente que conlleve el nacimiento de una nueva realidad, la de aquella Andalucía libre por la que vivió y murió Blas Infante, y que el definió como una Andalucía soberana constituida en democracia republicana.

¡Viva Andalucía libre!

En Málaga, a 4 de diciembre de 2012

CUT-BAI

Colectivo de Unidad de los Trabajadores – Bloque Andaluz de Izquierdas

MAIS

Mesa Andaluza de la Izquierda Soberanista

(AndCom, Jaleo!!!, JIRA, NA, RRA e independientes)

SAT

Sindicato Andaluz de Trabajadores/as

Movilizaciones por el 4D en Granada, Jaén y Málaga

jaén 4

Jaén

granada

Granada

málaga

Málaga (acto nacional y unitario)